Hoy en día, existen muchas formas, causas, imágenes y facetas del sinhogarismo en nuestra sociedad.

En los últimos años, se ha hecho cada vez más evidente en la ciudad federal de Bonn que no hay suficientes viviendas asequibles disponibles para personas con bajos ingresos.

Esta escasez se refleja seriamente en el paisaje urbano, ya que las personas sin hogar se alojan cada vez más en espacios públicos y utilizan para sí las infraestructuras de la ciudad. Además, las tasas de ocupación de los albergues de emergencia y de los albergues para personas sin hogar están aumentando.

Esta situación es especialmente problemática para los jóvenes que, al haber alcanzado la mayoría de edad, ya no pueden beneficiarse de los servicios de asistencia social a la juventud. Estos jóvenes suelen estar preocupados por cuestiones existenciales y tienen un entorno social inestable con pocos contactos sociales, lo que significa que a menudo se ven abandonados a su suerte.

En consecuencia, la falta (inminente) de vivienda suele afectar a esos jóvenes que se encuentran en condiciones de vida inseguras y con escasa seguridad social. Las consecuencias de vivir en la calle son inaceptables para los afectados, pero también para la política y la sociedad.

Nuestros servicios de asesoramiento tienen como objetivo encontrar alojamiento, proporcionar apoyo para superar problemas agudos y centrarse en la participación independiente en los procesos sociales.

Los afectados reciben asesoramiento, acompañamiento y apoyo de trabajadores sociales para restablecer su participación social. Los métodos y principios de trabajo utilizados se basan en los métodos de trabajo y la actitud básica del trabajo social de calle.

El programa "¡Por fin un HOGAR! se dirige específicamente a jóvenes de 18 a 26 años de Bonn.